7/06/2009

PARADIGMAS EN LA EDUCACION

PARADIGMAS EN LA EDUCACIÓN


Hace 15 años la misión científica, educación y desarrollo afirmo “Un maestro desactualizado que transmite año tras año, discursos pedagógicos vetustos, no permiten el avance de la ciencias, petrifican el conocimiento y van en contravía del desarrollo”, hoy nos debemos de preguntas ¿Cuáles han sido los avances en materia de modelos y estrategias pedagogías que han permitido el desarrollo de la educación en nuestras instituciones de educación publica?, ¿estamos preparados los docentes en la implementación y uso de herramientas tecnológicas acordes con los cambios en la cultura escolar de los jóvenes?, ¿Cómo se esta reconfigurando la relación docente alumno con la información y el conocimiento?, ¿Cuál es la responsabilidad social de la escuela en el desarrollo tecnológico, político y cultural del país?.

Todo lo anterior lo debemos analizar a partir de la afirmación que nos indica “Una de las finalidades de la educación, es capacitar a los educandos para comprender, crear y participar en la cultura de su tiempo” en donde la enseñanza debe adaptarse a los cambios producidos por el desarrollo tecnológico, para lo cual la educación se debe centrar en la generación de mayores niveles de competitividad en la aplicación de la ciencia y la tecnología para el desarrollo de la industria y la necesidad de desarrollar en los alumnos habilidades para formar ciudadanos con un espíritu científico, con pensamiento abstracto bien desarrollado, con capacidad de trabajar cooperativamente, con voluntad de saber, amor por el conocimiento y disciplina de trabajo, con pensamiento critico y creativo en todas las áreas del saber humano, con competencias necesarias para la participación democrática con competencias básicas para la reflexión y la argumentación ética, pero todo esto enmarcado en un proyecto educativo institucional motivado por docentes capaces de romper paradigmas frente a la implementación de estrategias pedagógicas que motiven la participación activa de los educandos.


En las instituciones educativas publicas se debe tener en cuenta la función social de estas instituciones frente a sus estudiantes, y no tomar la educación media como un paso transitorio a la educación superior, desarticulando las áreas general y técnica generando la graduación de jóvenes sin mayores competencias y que en la mayoría de los casos por su situación socio económica no pueden seguir estudios superiores. Por lo anterior se deben de implementar programas y proyectos en donde predominen la transversalidad entre las áreas con un componente teórico practico donde la complementariedad del currículo y la exploración del saber científico tengan lugar, fundamentado en la flexibilidad y diversificación de oportunidades, con un desarrollo positivo de la personalidad y un mejoramiento de la calidad de la enseñanza de las áreas científicas y tecnológicas, para lo cual se debe de promover un cambio de las estructuras mentales y rompimiento de paradigmas de los principales actores responsables de este proceso direccionado por los directivos y docentes comprometidos y motivado por una labor educativa de calidad.

Otro aspecto importante a tener en cuenta es la condición socio económica de la mayoría de los estudiantes de los colegios públicos del país para lo cual Turbay, Catalina 2003a considera “los bajos ingresos familiares insuficientes para ingresar a la educación superior, la concentración de las instituciones de educación superior en las tres principales ciudades (Bogotá, Cali y Medellín) y la poca relación del proyecto educativo institucional PEI con el contexto local y regional, son obstáculos que han de ser tenidos en cuenta en el diseño de una política de educación media mas acorde con la realidad del país”.

La perspectiva de los estudios se ha concentrado en definir a la juventud como un conglomerado poblacional definido en términos de la edad, por el consumo frente a las industrias culturales, o por su condición de pre-funcionalidad (se están preparando para ser en el futuro), desconociendo la emergencia de las culturas juveniles como fenómeno social y cultural contemporáneo, que invita a pensar la juventud como actores sociales y culturales activos, con intereses, características racionalidades, éticas, estéticas, y sentido de vida particulares, que deberán ser estudiados y tenidos en cuenta, en el momento de pensar una iniciativa educativa pensada para ellos.

Para finalizar, es importante tener en cuenta que las herramientas que no brinda la tecnología en donde las acciones de apropiación de estas por parte de los docentes y alumnos son las que pueden marcas la diferencia e inducir el la generación de ambientes de aprendizaje ricos en información de interés para los educandos, Alan Freddy Carrasco Dávila afirma “Las tecnologías de la información y comunicación están cambiando las formas de trabajo, los medios a través de los cuales las personas acceden al conocimiento, se comunican y aprenden. Por ello, resulta paradójico cómo dentro de una institución educativa se puede estar investigando con los últimos procesos y herramientas científicas al mismo tiempo que se sigue "enseñando" con una tecnología convencional; esto es debido, a la escasa formación del profesorado respecto al conocimiento y uso de la tecnología, además de existir problemas relacionados con la actitud de los profesores hacia los nuevos medios. Se puede decir que, sin una adecuada formación del profesorado, no es posible desencadenar la "revolución tecnológica" que la escuela está demandando”.

Y podemos estar de acuerdo en que “Todavía estamos educando a nuestros jóvenes como si el mundo del mañana fuera a ser una simple prolongación del pasado mas resiente” Marcel coderch.


José Manuel Castelblanco A.